“Se
acabó. He salido de casa para no volver. Te puedes quedar con todo. Yo me voy con
lo puesto. Dormiré en casa de una amiga y mañana partiré con rumbo desconocido.
Lo he intentado todo y te he amado con toda mi alma, pero se terminó. No me
llames. No voy a contestar. Espero que seas feliz." La mujer pelirroja
desapareció en la distancia. Le di las gracias mentalmente por su presencia en
la foto. El diálogo imaginado jamás tuvo lugar, y lo más probable es que no haya
acertado. Ocurre a diario en numerosas ocasiones. Las posibilidades de que
falle la bola de cristal con los pensamientos de los demás son infinitas. Lo mejor es preguntar...
Foto y texto: Artica Blues