domingo, 8 de junio de 2014

INFANCIA (HAIKU)

Hierba entre la ropa

buscando ranas

jugando a piratas

mientras me río.

                             Artica Blues

SUELTO TODO



Suelto amarras

Suelto lastre

Suelto todo

Y espero

No tengo prisa


Y ahora, ¿hacia adónde?

                                           Artica Blues

MUJERES

Una mujer que se acepta a sí misma no habla mal de los hombres, no tiene necesidad alguna, ya que se siente plenamente digna de sí misma, sabe que tiene recursos, ejerce sus derechos y asume la responsabilidad sobre sus propios actos.

Una mujer que se acepta a sí misma, no habla mal de otras mujeres, ni siente celos ni envidia de otras mujeres. Muy al contrario, se alegra de que haya mujeres que triunfen y creen una identidad de mujer triunfadora donde antes no la había para que otras mujeres puedan seguir el camino trazado por ella.

Una mujer que se acepta a sí misma tiene amigas luchadoras, dignas y seguras de sí mismas. Le gusta hacer equipo con otras mujeres y se fijará en sus valores interiores.

Una mujer que se acepta a sí misma se toma los fracasos como información, y se incentiva a sí misma para seguir adelante y creer más que nunca en sí misma, pues sabe que no ha de esperar a que nadie crea en ella. Una mujer que se acepta a sí misma es su mejor espónsor, su mejor aliada cuando las cosas se ponen mal.

¿Cómo?

Recuerda las veces que logró salir de un apuro, las metas que alcanzó, las dificultades que superó. Cuando las cosas se ponen mal, una mujer que cree en sí misma, en lugar de irse de compras, se va de repaso de sus capacidades y de recuento de sus éxitos y logros. Consecuentemente, acaba por decirse: "En peores nos hemos visto, y salimos de todas" o "lo que no te mata, te fortalece".

La maldición de Eva, Rosetta Forner (Ed. Planeta)

MASA CRÍTICA



Los cambios se producen así. Aunque haya períodos en los que parezca que no pasa aparentemente nada, se siguen sumando iniciativas, esfuerzos y sueños. Nada es en vano. Y entonces se produce el milagro. A veces cuando ya se ha perdido toda esperanza. 

Definición de masa crítica

"Masa crítica es en sociología una cantidad mínima de personas necesarias para que un fenómeno concreto tenga lugar. Así, el fenómeno adquiere una dinámica propia que le permite sostenerse y crecer. Esta teoría es un paralelismo con el mismo concepto en física.

Un ejemplo simple puede ser, pongamos, en una gran ciudad. Cuando una persona se para en la calle y mira hacia el cielo, no pasará nada. La gente continuará su camino ignorándolo. Cuando tres personas se paran y miran al cielo, quizá algunas personas se den la vuelta para a continuación seguir andando. Pero sólo se necesita un pequeño número (que depende de la cultura, la hora, el ancho de la calle y otros factores) de personas necesarias —digamos, 5 o 7— para hacer que los otros se paren y miren hacia el cielo también. Este número se llama "masa crítica".

El concepto tiene numerosas aplicaciones en diversos contextos, entre ellos política, dinámica de grupos, publicidad y marketing (por ejemplo el marketing viral), opinión pública y moda."



Fuente Wikipedia

viernes, 6 de junio de 2014

¿DÓNDE VIVO?





Nací por casualidad en un puntito de un país de un planeta que pertenece a un sistema solar de una galaxia, una de tantas. Nunca me he sentido de ningún sitio que no sea un mundo multicultural, variado e indefinido de fronteras difusas, ni tampoco he tenido puntos de referencia locales. Es decir, la normalidad para mí no existe. Y me he sentido incomprendida. Teóricamente vivo en una nación llamada España, pero mi realidad no corrobora los hechos. Mi vida se desenvuelve en un microcosmos internacional en el que corre constantemente una brisa fresca que ventila los usos y costumbres fijos e inamovibles más arraigados.

Mi vida cotidiana transcurre entre diversas nacionalidades. Trabajo con personas de distintas procedencias y eso me enriquece. Y vivo en un barrio y en un edificio donde hay más gente de otros países que del mío propio.  Jamás me he sentido amenazada.

Suelo comer en restaurantes de diferentes partes del mundo, donde me atienden personas de los lugares más recónditos. Viajo así sentada a una mesa. Gracias a todos ellos. Me gusta, lo celebro y lo busco.

En fin, vivo en una dimensión que no es exactamente la castiza, y me encanta. Me desplazo por Internet a los rincones más lejanos e intercambio puntos de vista e información con otros. Me moriría en un mundo excesivamente local. Me ahogaría sin remedio en él por falta de aire.

Una vez me pregunté el porqué de la presencia de tantos extranjeros en mi vida. Entonces desfilaron ante mí todas las personas de numerosos países que han pasado por ella. ¿Los he buscado yo o ellos me han buscado a mí? Un día se me hizo la luz en el restaurante de un amigo sirio. Están tan desubicados como yo. Viven sin certezas locales y navegan como pueden entre personas que creen que su vida cotidiana es la realidad. Quizá por eso sea tan importante viajar. Permite relativizar todo para ganar perspectiva. Tras una temporada sin hacerlo, empiezo a creerme que mi realidad es la única. Entonces, se me enciende una luz roja de advertencia que me recuerda que el punto diminuto en el que vivo está perdido en la inmensidad. Y que no es nada comparado con esta.

Mi nacionalidad es: ciudadana del mundo.

                                                                              Artica Blues





MELANCOLÍA



Días matizados de tristeza.

Música brasileña de fondo.

Nube de melancolía.

No la ahuyento, buceo en ella.

Buscando la causa.



Mi corazón late con ronquera sorda.

Mientras me enredo en sueños de colores.

Que flotan a mi alrededor.

Como pompas de jabón infantiles.

Prometiéndome ligereza.



Añoro presencias ausentes.

Espíritus libres que partieron.

Risas sonoras, ahora mudas.

Voces de suaves caricias.

Vivo recordándolo.



Mi nivel de energía roza el suelo.

No huyo, lo acepto.

Cuando caiga al máximo.

Volverá a elevarse con fuerza.

Sosteniéndome siempre.



Mañana me levantaré.

La luz me saludará de nuevo.

Le daré una cálida bienvenida.

Otro día, otro reto, otro sentir.

Y a otra cosa mariposa.


                                                               Artica Blues






miércoles, 4 de junio de 2014

SILENCIO

Acomodarse en un espacio

Cerrar los ojos

Sentir la respiración

Percibir el hálito de vida en el interior

Desechar pensamientos

Alejarse del exterior

Resguardarse en el centro

Y amar el silencio....... 

                                       Artica Blues