Hago tiempo, callejeo. De
nuevo me sorprende encontrar lugares como este en un barrio que aparentemente
parecía no prometer nada. Lo primero que llama
mi atención es el mural del edificio. Luego, voy reparando en otros detalles.
Una plaza en el centro. Colores. Poesía. Bancos. Parque infantil. Algo más que un mero lugar de encuentro. Luz entre tanto gris.
Fotos y texto: Artica Blues