El metro de Madrid refleja a la perfección
la situación que vive el país. Hoy a las ocho de la mañana el tren ha tardado
en llegar ocho minutos. Esto comienza a ser la norma. A esa hora la gente se
dirige a su trabajo con el tiempo justo. Los intervalos son ya tan amplios que
da tiempo a todo. Puedes protestar sobre todo esto con alguien que no conoces u
observar e inventar historias con la gente que espera en el andén. También es
posible buscar un buen encuadre por si mereciera la pena hacer una foto. Se
puede meditar, relajarse, fantasear, tomar notas, leer un libro, escuchar
música o simplemente pensar en lo que haremos mañana o en lo que hicimos ayer. Por
la mañana en el andén hay cientos de historias de personas que comienzan su
día. Y es posible que lleguen tarde.
Texto y fotos: Artica Blues
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